El grave problema de la falta de vivienda para los trabajadores del sector turístico en las zonas turísticas de Canarias es una preocupación acuciante tanto para los empresarios como para los empleados. La falta de alquileres a precios razonables obliga a los trabajadores a vivir cada vez más lejos de sus lugares de trabajo, lo que además implica lidiar con los atascos de tráfico.
Ante esta situación, se necesitan soluciones urgentes y factibles que sean más rápidas que la burocracia actual. Una de las propuestas es que los consistorios faciliten la construcción de viviendas por parte de empresarios dispuestos a alquilarlas a precios accesibles. Además, se sugiere utilizar la Reserva de Inversiones de Canarias como mecanismo para este fin.
La falta de vivienda está afectando incluso a la capacidad de los hoteles para ofrecer un servicio de excelencia, ya que no cuentan con suficiente personal para cubrir los puestos demandados. Esto ha llevado a algunos establecimientos a cerrar unidades o plantas.
Los sindicalistas también alertan sobre el colapso que amenaza al sector turístico debido a la falta de vivienda y los problemas de movilidad, que están generando una sobrecarga física y mental en los empleados. El absentismo laboral ha aumentado significativamente en el sector.
Es evidente que se necesita una voluntad por parte de las administraciones para encontrar soluciones a este problema. Si hay suelo urbano disponible, empresarios dispuestos a construir viviendas y trabajadores con empleo estable y salarios adecuados, es necesario que las administraciones actúen para facilitar la construcción de viviendas asequibles.
Es importante resaltar que la vivienda vacacional no es la causa principal de este problema. Existen muchas más viviendas desocupadas que las utilizadas para la vivienda vacacional. Además, la vivienda vacacional es una actividad económica importante en las Islas Canarias, generando miles de millones de euros y empleo directo para muchas familias. Limitar esta actividad afectaría gravemente a la economía y a las familias canarias.
Es necesario desmitificar algunas ideas falsas sobre la vivienda vacacional, como que fomenta la turismofobia o que los turistas que la eligen tienen bajos presupuestos. Por el contrario, la vivienda vacacional contribuye al turismo de calidad y los turistas que la utilizan suelen gastar más que los que eligen hoteles todo incluido.
En lugar de limitar la vivienda vacacional, las administraciones deben centrarse en aumentar la oferta de vivienda social y brindar mayor protección legal a los propietarios que alquilan sus inmuebles a residentes. También se deben implementar políticas para mejorar la conectividad y reducir los precios del transporte hacia las islas menores, que dependen en gran medida de la vivienda vacacional.
El problema de la falta de vivienda para los trabajadores del sector turístico en Canarias requiere soluciones urgentes y factibles. Criminalizar la vivienda vacacional no es la solución, ya que esta actividad desempeña un papel importante en la economía y el bienestar de las familias canarias. Es necesario abordar las verdaderas causas del problema y tomar medidas para aumentar la oferta de vivienda social y mejorar la protección legal para los propietarios. ¿Cuál es tu opinión sobre este tema? ¿Consideras que limitar la vivienda vacacional es la solución?